de rasgos finos,
te empeñas en ver gigantes
tras mis molinos.
Yo me miro y solo veo
un Sancho Panza,
antihéroe de tebeo
de corta lanza,
que abandonó los entuertos
y las posadas,
de los caminos inciertos,
de corta lanza,
que abandonó los entuertos
y las posadas,
de los caminos inciertos,
en madrugadas
donde al final la princesa
monta el corcel,
del rufián que la embelesa
con su oropel.
Ya no quedan Dulcineas
en el Toboso,
donde un alma que canea
halle reposo,
solo hay la triste figura
que sobrevive,
buscando a su mal la cura
mientras escribe.